viernes, 28 de diciembre de 2007

¿Y si estamos equivocados?

Fácil resulta hoy en día asegurar que la tierra no es plana y que gira alrededor del sol. Pero no siempre fue así. La cosmología antigua dio lugar a diversas teorías sobre la forma que tiene el planeta que habitamos y su entorno.


Los antiguos griegos creían que el mundo estaba sostenido por unos pilares que se apoyaban sobre los hombros del titán Atlas. Culturas asiáticas sostenían que el mundo era un plato cubierto por una cúpula con orificios que dejaban ver la luz que había afuera, formando las estrellas.


Junto con la forma del mundo se cuestionaba la forma del universo. Durante siglos se tuvo como válida la teoría de que la tierra era el centro del universo y todo giraba a su alrededor. La aparición de Nicolás Copérnico primero, y Galileo Galilei después, ayudados por los avances tecnológicos de la época, pudieron aclarar las dudas al respecto.


Las primeras religiones estaban pobladas por múltiples dioses, pero a fuerza de sangrientas persecuciones y campañas de difamación el monoteísmo que hoy impera fue ganando terreno.


Estos cambios en la forma de ver nuestro entorno y nuestra vida dejan en el aire la inevitable pregunta: "¿Cuáles saberes que damos por ciertos serán erróneos?". Será cuestión de esperar a que los avances tecnológicos nos permitan aclarar dudas o desmitificar hechos que damos por ciertos.


Quizás en el futuro podamos descubrir a ciencia cierta lo que hay después de la muerte, reivindicando o destruyendo teorías tales como la reencarnación, la existencia del cielo y el infierno o el mismísimo puente Chinvat1.


Lo único seguro es que tranquilamente podemos estar equivocados.


domingo, 16 de diciembre de 2007

El Despertar

Me despertó la sirena de una ambulancia que se detuvo en la puerta de casa. Corrí a ver que sucedía y dos hombres bajaban apresurados con una camilla. Entraron casi atropellándome y sin mediar palabra. Los seguí intentando averiguar lo que pasaba.


Entraron en mi habitación y fue entonces cuando lo vi. Mi cuerpo todavía estaba en la cama. Parecía dormido. Intentaron respiración boca a boca pero no funcionó. Subieron el cuerpo a la camilla y se fueron tan apurados como habían entrado.


Era sólo un sueño, pero desperté con la garganta seca, las manos transpiradas y el corazón agitado.


Desde aquel día lo primero que hago al levantarme por la mañana es comprobar que mi cuerpo me acompaña.

lunes, 10 de diciembre de 2007

¡Este Regalo es una Bosta!

Para la cartera de la dama y el bolsillo del caballero. Si no saben que pedirle a Papá Noel en éstas navidades, traemos la solución a sus dilemas.


Haga un lugarcito en su hogar, ése lugar donde pone las cosas que desea que las visitas envidien y prepárese para ser el centro de los comentarios en las próximas reuniones de consorcio. Traemos en oferta exclusiva y limitada heces de Rinoceronte. Puede elegir entre sus 4 aromáticas variedades: Rinoceronte con diarrea, Rinoceronte que comió locro, Rinoceronte que toma meta lavado o Rinoceronte constipado.


Llame ahora mismo y recibirá de regalo la revista que el rinoceronte leía mientra "horneaba" su regalo.